1985 En la novela, “El Amor en los Tiempos del Cólera” Gabriel García Márquez, parece habernos dejado un manual, para enfrentar el COVID, les invito a leerlo:

“Capitán, el niño está preocupado y muy incómodo debido a la cuarentena que el puerto nos impuso”.

–  ¿Qué te preocupa, muchacho?  ¿No tienes suficiente comida?  ¿No duermes lo suficiente?

–   – No es eso, Capitán.  No puedo soportar el no poder desembarcar y el no poder abrazar a mi familia. 

Cargando Culpa

– Y si te dejan salir del barco y tus seres Amados se contaminan, ¿cargarías con la culpa de infectar a alguien que no puede soportar la enfermedad?

– – Nunca me lo perdonaría, pero para mí que inventaron esta plaga.

 – Puede ser, pero ¿y si no fue inventada?

 – – Entiendo lo que quiere decir, pero me siento privado de mi libertad, Capitán, me privaron de algo.

– Y tú te privas aún más de algo. 

– -¿Está Usted, jugando conmigo?

– De alguna forma. 

Auto Privación

– Si te privas de algo, sin responder adecuadamente, habrás perdido. 

– -“¿Entonces quieres decir, como dices, que si me quitan algo, para ganar debo privarme de otra cosa?”

– Exactamente, yo hice cuarentena hace 7 años atrás

–  – ¿Y de qué se tuvo que privar?

 – Tuve que esperar más de 20 días en el barco.

 – Había meses en que ansiaba llegar al puerto y disfrutar de la primavera en tierra.

 – Hubo una epidemia. 

 – En Porto Abril, se nos prohibió bajar. 

 – Los primeros días fueron duros. 

 – Me sentí como tú.

Usando La Lógica

 – Pronto comencé a enfrentar esas imposiciones, usando la lógica.

 – Sabía que después de 21 días de este comportamiento, se crea un hábito, y en lugar de quejarme  y crear hábitos desastrosos, comencé a comportarme de manera diferente a los demás. 

 – Empecé con la comida.  Me propuse comer la mitad de lo habitual.  Luego comencé a seleccionar los alimentos más digeribles, para no sobrecargar el cuerpo.  Comencé a nutrirme con alimentos que, por tradición histórica, habían mantenido al hombre sano.

Pensamientos Saludables Y Nobles

 – El siguiente paso fue agregar a esto una purificación de pensamientos no saludables y tener pensamientos cada vez más elevados y nobles. 

 – Me propuse leer al menos una página cada día de una discusión que no conocía. 

 – Me puse a hacer ejercicios en el puente del barco.

 – Un anciano de la India, me había dicho hace años que el cuerpo mejoraba al retener la respiración.

 – Me puse a respirar profundamente cada mañana.

 – Creo que mis pulmones, nunca habían alcanzado tal capacidad y fuerza. 

Oración Y Agradecimiento

 – La tarde fue la hora de la oración, el momento de agradecer a una Entidad Divina, por no haberme dado, como destino, privaciones graves durante toda mi vida.

 – El anciano, también me había aconsejado que tuviera la costumbre de imaginar que la luz entraba en mí y me hacía más fuerte.  También podría funcionar para los seres queridos que estaban lejos, por lo que también integré esta práctica en mi rutina diaria en el barco. 

 – En lugar de pensar en todo lo que no podía hacer, estaba pensando en lo que haría una vez que llegara a Tierra firme.

 – Visualizando las escenas de cada día, las vivía

 – intensamente y disfrutaba de la espera. 

 – Todo lo que podemos obtener en seguida, rápido, no es interesante.

 – Esperar, sirve para sublimar el deseo y hacerlo más poderoso.

 – Me privé de comidas ricas, botellas de ron y otras delicias.  Me habían privado de jugar a las cartas, de dormir mucho, de practicar el ocio, de pensar solamente de lo que me estaban privando.

 –  – ¿Cómo terminó, Capitán?

 – Adquirí todos esos nuevos hábitos.  Me dejaron bajar del bote mucho más tarde de lo esperado. 

 – -¿Se privó de la primavera, entonces?

 – Siií, ese año me privaron de la primavera y muchas otras cosas, pero aún así florecí, llevé la Primavera, dentro de mí y nadie me la puede quitar.”

~Gabriel García Márquez

Paz En La Tormenta

Las situaciones difíciles nos llevan a encontrar a Dios. Él ha prometido paz en medio de la tormenta, vida en medio de la muerte, flores en medio del desierto, oasis en el paisaje agreste y oscuro, propósito en medio de la incertidumbre. El Señor a si lo ha dicho: “En el mundo tendréis aflicción más confiad, yo he vencido al mundo.

El profeta Isaías lo dijo en el capitulo 23, verso 6: “Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera”.

No retrocedas y menos te paralices…avanza con la mirada puesta en Señor y encontrarás el verdadero amor en tiempos del Covid 19.

El verdadero amor viene del creador, nuestro Señor y Salvador. Esta crisis nos ha demostrado que todo en la vida tiene fecha de expiración, menos el amor divino y la eternidad que él nos da. Eso jamás tendrá fecha de expiración.

Dios contigo ayer, hoy y siempre.

Serafín Contreras Galeano.

www.serafincontreras.com