En seis tribulaciones te librará, y en la séptima no te tocará el mal. Job 5:19 .

En esto Eliphaz habló según Dios. Podemos vernos en tantas aflicciones como días de trabajo hay en la semana, pero el Dios que nos ha ayudado durante estos seis días seguirá protegiéndonos hasta que nuestra liberación sea completa.

Rápida Sucesión

La rápida sucesión de nuestros males es una de las pruebas más duras a que se ve sometida nuestra fe.  Antes de habernos repuesto de un golpe, viene otro, y después otro, hasta que llegamos a perder la confianza.

Pero también la continua sucesión de liberaciones nos anima extraordinariamente.  Nuevas canciones resuenan en el yunque bajo el martillo de la aflicción, hasta que en el mundo espiritual vemos el anticipo del «Herrero Armonioso».  Nuestra confianza es que cuando el Señor nos envía seis pruebas, serán seis; ni una más. Tal vez no tengamos un día de descanso, porque sobre nosotros vienen siete pruebas.  ¿Qué sucederá entonces? «En la séptima no te tocará el mal».

Cuando El Mal Ruge

El mal puede rugir, pero será mantenido a distancia y no nos tocará. Su aliento podrá molestarnos, pero ni siquiera su dedo meñique nos dañará.  Ceñidos nuestros lomos, saldremos al encuentro de las seis o siete pruebas, y dejaremos el temor para los que no tienen Padre, ni Salvador, ni Santificador.

Hoy contaré con el resguardo y la protección del Señor.

Gracias Señor, aunque a veces las pruebas pueden venir sobre mi vida tu sustento es vital para mi existencia.  Nuevamente eres mi liberador. Amén.

Charles Spurgeon.
Libro De Cheques del Banco De La Fe.