En Hungría el pastor Nemeth Sandor sabe bien lo que es vivir bajo un régimen ateo. En los años ochentas las autoridades comunistas de su país trataron repetidamente de destruir su congregación. Hoy lidera una de las iglesias más grandes y de más rápido crecimiento en Europa.

En Una Pequeña Casa

La congregación inició en una pequeña casa con un grupo de personas reunidas a las afueras de Budapest. El año era 1979.
“Fue muy difícil. Estábamos bajo la dictadura comunista en Hungría. Los jóvenes empezaron a llegar a la casa y el Espíritu de Dios se movía de poderosamente y eso causó que las autoridades se molestaran”, explica Sandor.
La religión organizada era prohibida en Hungría. Los creyentes como el pastor Sandor se vieron obligados a reunirse secretamente.

“Se consideraba que los cristianos eran sub-humanos, o ciudadanos de segunda clase. Muchas veces la policía comunista trató de destruir la casa. Querían arrasar el lugar. Veían a la iglesia como un callejón sin salida de la historia”, dice el pastor.

Una iglesia de Fe

30 años más tarde, esa pequeña iglesia oculta se ha transformado en esta mega iglesia llamada Iglesia de Fe. Con 50 mil asistentes, unas 250 congregaciones de la congregación se reúnen cada domingo por toda Hungría.

“Nunca me imaginé esto y solo puedo decir es que es un milagro” dice Sandor.
Un domingo, cuando el noticiero CBN llegó a la iglesia a las 8:30 de la mañana,  encontró una masa de humanidad llegando a una iglesia de fe en las afueras de Budapest.

El tráfico estaba atestado. La reunión empieza a las 10 de la mañana pero a las 9, miles estaban haciendo fila, esperando que se abrieran las puertas.A las 10:30 el auditorio estaba lleno y la banda empezaba a tocar. Los balcones y los salones adicionales también estaban llenos..

Vientos de cambio

La gente venía de pueblos rurales y ciudades lejanas para formar parte de lo que el
 Pastor Nemeth dice que son vientos de cambio sacudiendo esta nación anteriormente comunista.

“Quiero que Hungría y los países que nos rodean experimenten una relación con Jesucristo genuina y verdadera. Quiero que la gente conozca el Dios de la Biblia y que se conviertan en cristianos nacidos de nuevo” comenta el pastor.

El Pastor Nemeth dice que ningún domingo faltan personas que pasen adelante para aceptar a Cristo o para pedir sanidad.
 
 “Yo estaba a punto de suicidarme, pero Dios me rescató. Encontré un lugar de restauración aquí en la Iglesia de Fe”, manifiesta una de las asistentes a la iglesia.

Sin Miedo

Muchos de los que entrevistamos hablaban de los que Dios había hecho por ellos a través del ministerio del pastor Nemeth. Como la familia Sava, por ejemplo: “Cuando la gente escuchaba el nombre Sava se aterrorizaban.

Había mucho miedo porque eran muy conocidos”, comenta uno de ellos.
Los hermanos Sava antes eran la familia criminal más infame. Hoy, con la ayuda del ministerio de la iglesia en las cárceles, muchos hermanos  Sava se han convertido en cristianos renacidos.
“Desde que nos arrepentimos, cuando la gente menciona el nombre Sava, ya no tiene miedo. Es porque todos hemos cambiado y Dios esta haciendo algo nuevo en muestras vidas” dice uno de los hermanos Sava.

Sin distinción

Los domingos hay políticos destacados, artistas húngaros famosos, judíos mesiánicos, corredores de bolsa adinerados y gente de todo tipo adorando juntos.

En 2001, Nemeth Sandor salió al aire con las reuniones dominicales en la televisión húngara que cubre el país: “Y esto está impactando tremendamente a la sociedad. Recibimos tantas cartas positivas de personas que dicen que su concepto del cristianismo ha cambiado desde que empezamos a poner el servicio del domingo al aire” agrega Nemeth.

Y cuando no está predicando, Nemeth está escribiendo libros, supervisando un diario político, o ayudando a su esposa en la administración de la academia primaria y secundaria de la iglesia. Actualmente está diseñando una nueva universidad.

Maravillas Naturales

A pesar de las maravillas naturales de Budapest, existe un recordatorio espantoso del impacto que el comunismo ha tenido sobre esta nación: “El comunismo destruyó nuestro sistema de valores. Familias quebrantadas, amistades destruidas.

La red extensiva de espías secretos obligaba a la gente a desconfiar de los demás. Estamos tratando de cambiar todo eso. Queremos que la gente sepa que hay libertad y perdón en el mensaje del evangelio. Queremos liberar a las personas del pasado”, comenta Sandor.

La sombra del pasado

Para el pastor Sandor, el pasado en ocasiones  sigue causándoles problemas.  Muchos se preguntan si tiene espías en su congregación, “donde esta en vigor la obra de Dios, habrán espías, siempre habrán informantes, los que observan desde el margen. Yo no lo puedo imaginar de otra forma, especialmente aquí en esta región. Pero no me importa si están aquí. Solo quiero que no mientan, que digan la verdad”.

La iglesia ha sido investigada repetidas veces por el departamento de impuestos de Hungria – pero no han encontrado ninguna irregularidad en las finanzas.

“Jesús también estaba bajo inspección, así que tenemos que acostumbrarnos al escrutinio. Pero nada nos va a impedir a predicar el mensaje de Jesucristo”.
Son las 4 de la tarde, seis horas desde  que comenzó la reunión y el pastor Sandor por fin esta concluyendo.

Este domingo, el insta a los miembros a dedicarse a cambiar el ambiente espiritual de su nación, con la esperanza de un dia difundir  el mensaje de Jesucristo por todo el país.

“Queremos ver a Hungría salir de su crisis económica y moral. En el futuro, queremos ver cristianos comprometidos tomando posiciones de influencia para que puedan 
ayudar a sus compatriotas y cambiar la sociedad”, concluye Sandor.

Fuente: CBN mundo cristiano